La semana pasada, tristemente, su muerte le dio la razón a decenas de campañas sobre el uso del cinturón de seguridad. John y su esposa Alicia, que lo acompañó en las altas y bajas y que se casó con él en dos ocasiones, regresaban a Estados Unidos desde Noruega, donde Nash Jr. había recibido el Premio Abel. En Nueva Jersey, a las 4:30 de la tarde, el taxi que los conducía se estrelló contra una barrera. El taxista quedó vivo, pero ellos salieron disparados por entre el parabrisas.
http://www.semana.com/gente/articulo/john-nash-jr-el-adios-de-un-genio/429555-3
No hay comentarios:
Publicar un comentario