Un trabajo de la Fundación Británica del Corazón alertó la semana pasada sobre el problema del sedentarismo de los oficinistas.
Según el reporte para el cual fueron
encuestadas 2.000 personas, quedarse sentado por largos periodos provoca serios
quebrantos de salud que no pueden curarse con ir al gimnasio.
Más de la mitad de los encuestados
confesó que almuerza en su escritorio y el 78 por ciento declaró que pasaba
mucho tiempo allí. “Todos somos víctimas del entorno en el que estamos a
diario.
Por eso necesitamos innovar y buscar
una forma de neutralizar el efecto nocivo del sedentarismo”, afirma Gavin
Bradley, fundador de la campaña Get Britain Standing.
El sedentarismo afecta el metabolismo y aumenta
el riesgo de sufrir enfermedad cardiovascular, diabetes tipo 2, cáncer y
trastornos mentales.
Afecta
incluso a quienes hacen ejercicio y tienen buen estado físico.
Los expertos recomiendan hacer pausas activas y
pararse cada media hora del puesto.
